Co-Branding

¿Qué es el co-branding?

Existen pocas frases que representen tan bien el mundo de la publicidad como "En el amor y la guerra, todo se vale". Y es que como bien sabrás, el marketing es una especie de guerra.

Por eso, a lo largo de la historia se pueden distinguir casos de marcas que han librado la batalla por posicionarse en solitario. ¡Ellas contra el mundo! Pero también, al revisar la historia, se pueden encontrar casos en los que dos o más marcas entablaron alianzas para lograr el dominio total. ¿Sabes cómo se llama ese fenómeno? co-branding.

Entonces desde el punto de vista del marketing, ¿qué es el co-branding? Se podría resumir como que el co-branding es definición de colaboración.

Es una técnica en la cual al menos dos marcas unen sus fuerzas para crear una campaña publicitaria que revolucione el mercado. Lo más conveniente es que ambas tengan puntos en común evidentes, como la naturaleza de sus productos o la coincidencia de su audiencia.

Sin duda alguna, el co-branding funciona con bastante éxito. Desde el momento en que las campañas son lanzadas las personas se sienten atraídas, pues la combinación de dos marcas siempre es una idea rompedora… Es una estrategia win-win (tú ganas y yo también) siempre que la alianza esté bien planificada.

¿Cómo funciona el co-branding?

Lo primero que debes saber es que el co-branding revoluciona por completo la forma de hacer marketing. Sin embargo, no es una idea nueva, de hecho, muchos expertos señalan que la década de los 90 fue el inicio de todo. Desde esos años hasta la actualidad se pueden citar muchos ejemplos de los cuales hablaremos más adelante.

El co-branding cambia la idea de que las marcas deben competir entre sí desde su nacimiento hasta el final de los días. No estamos negando que la competencia sea uno de los principales pilares del mercado, pero en ocasiones la unión hace la fuerza.

Pongamos, por ejemplo, que eres dueño de una marca de pizzas. ¿No te vendría bien aliarte con una marca de bebidas refrescantes? Muy probablemente las dos salgáis beneficiadas con la colaboración.

Sin embargo, no es tan simple. Para dar marcha al co-branding es necesario que ambas empresas entablen negociaciones y definan sus acuerdos.

A continuación empieza la parte creativa para dar respuesta a varias preguntas: ¿Cómo hacer para que la unión de ambas marcas aporte un valor añadido a los consumidores? ¿Qué mensaje se debe transmitir en la campaña publicitaria? ¿Qué canales de comunicación deben ser utilizados?

Tipos de co-branding

Existen muchas formas de aplicar esta estrategia, que dependen del resultado que se espera obtener. Y existen bastantes diferencias entre una y otra.

Por eso es importante que el especialista en marketing conozca a dónde quiere llegar, pero también sepa implementar los siguientes tipos de co-branding:

Co-branding de conocimientos: Este tipo de relación se produce entre dos marcas que tienen una segmentación de público bastante parecida, pero que, por una razón u otra, no compiten entre sí. Por ejemplo, porque se ubican en contextos geográficos diferentes, lo cual supondría una buena oportunidad de abrir nuevos mercados.
Co-branding de ingredientes: Tal como sugiere su denominación, se orienta al sector de los alimentos. Cuando existen dos productos que se pueden complementar y presentarse de forma conjunta, ¿por qué no hacerlo? ¡Imagina tus dos golosinas favoritas fusionadas en una sola!
Co-branding de competencia complementaria: Este es el caso en que dos gigantes de sus respectivas industrias se unen para marcar territorio. ¿Cómo lo hacen? Crean una solución a un problema de forma conjunta.
Co-branding de valores: Con esta variante no se pretende comercializar productos o servicios. La idea central es la de potenciar los valores de las marcas involucradas. Ocurre mucho en redes sociales cuando, de pronto, dos o más empresas comienzan a elogiarse entre sí. Eso ayuda a fidelizar a los clientes.
Co-branding de apoyo: En este caso una gran marca se une a otra de menor relevancia para potenciarse ganando visibilidad. Por lo general, el acuerdo económico suele ser menos favorable para la pequeña empresa, pero consigue su objetivo de posicionarse.

Beneficios del co-branding

Ambas empresas adquieren mayor reconocimiento.
Es una excelente oportunidad para entrar en nichos de mercado no explotados.
A nivel económico el co-branding es factible, ya que los costes se reparten proporcionalmente.
Refuerza la capacidad de ambas partes para entablar relaciones comerciales efectivas y la oportunidad de entablar nuevas alianzas en el futuro.

Ejemplos de co-branding

Vamos a repasar dos ejemplos de co-branding que han marcado tendencia:

Co-branding McDonald's – Oreo: Desde hace varios años la cadena multinacional de restaurantes de comida rápida ofrece una variación de su McFlurry elaborado con galletas Oreo trituradas con un resultado muy exitoso.
Co-branding Game of Thrones – Telltale Games: Este es un ejemplo claro de cómo entablar una relación win-win. La marca de la serie se unió con esta compañía de plataformas de juego para desarrollar un nuevo título que fue un éxito. De esta manera la serie llegó a oídos de muchas más personas, al tiempo que la desarrolladora registraba más y más descargas.

Tips para hacer un co-branding

Si estás pensando en meterte de lleno en el mundo del co-branding, debes tener en cuenta esta consideraciones:

Analiza con cuidado las futuribles marcas con las que te puedes asociar. Deben tener puntos en común con la tuya o de lo contrario todo puede ser un desastre.
Una vez que entres en contacto con los encargados de la otra empresa, es buen momento para comparar vuestros buyer persona ¿os dirigís al mismo público? Esa será una buena señal.
Estudia el segmento de mercado en el que cada una de las marcas es fuerte. Debe existir algún tipo de complementariedad , de lo contrario, el co-branding puede resultar insulso.
Deberéis compartir los gastos publicitarios a la mitad o tomar en cuenta algún criterio objetivo, como la importancia que tiene de cada una de las dos marcas. Sería justo que la empresa más importante obtenga un mayor beneficio económico a cambio de su poder de atracción.
Es necesario ser creativos. De nada vale entablar la alianza si no sois capaces de hacerle notar a vuestro público que estáis aquí.

Y eso es todo lo tenemos que contarte al respecto del co-branding. ¡Aprovéchalo tú también para potenciar tu marca!