Tanto la experiencia como la interfaz de usuario son dos condicionantes claves que determinarán el éxito o fracaso de una página web. Sin embargo, muchos incurren en el error de desatender lo relacionado con la arquitectura de la información. Como resultado, los esfuerzos por organizar una buena estrategia de contenidos habrán sido en vano. ¡Las páginas web deben ser digeribles y disfrutables!
En consecuencia, las pruebas de funcionalidad y estructura son parte fundamental durante el desarrollo de una página web, así como su posterior mantenimiento. Hoy en día existen un puñado de mecanismos para poder hacer estas comprobaciones, así que en esta oportunidad hablaremos de una de las mejores opciones: el tree testing.
Tree testing y UX son dos conceptos estrechamente ligados, pues consiste en una prueba que permite detectar cualquier incongruencia para luego eliminarla. Y lo mejor de todo es que esas inspecciones serán realizadas por los usuarios.
Su nombre significa “prueba de árbol” debido a que pone la lupa sobre cada una de las ramas de la estructura de la web. Además, lo hace de forma aleatoria designando a usuarios ciertas tareas y, como resultado, detectarán o no ciertas incongruencias que deberán ser corregidas.
Ha quedado comprobado que el tree test es especialmente útil para webs que ya fueron lanzadas al público. Así que te recomendamos que te quedes para leer sobre todo este tema. ¡Te explicaremos cómo hacer tu propio tree testing!
El tree test persigue el objetivo fundamental de corregir problemas de navegación dentro de una página web. Para ello pone la lupa sobre esas secciones que, por algún motivo u otros, son difíciles de encontrar por parte del usuario.
Tan solo bastará con brindar ciertas instrucciones para que sean los usuarios quienes, a través de los menús de tu web, lleguen a ciertos contenidos. Al tratarse de una prueba no tendrán relevancia aspectos como la apariencia de la página o su distribución, ya que la meta es verificar la accesibilidad de todas sus secciones.
¡Pero eso no es todo! Además de analizar los problemas de tu propia web, podrás hacer lo propio con las páginas de terceros, porque el tree testing es perfectamente aplicable a desarrollos realizados por otros.
Una de las cualidades del tree testing es su versatilidad. A diferencia de otro tipo de pruebas, puedes implementarla en el momento de desarrollar o rediseñar la web, pero también podrás hacerlo una vez que la página esté operativa. ¡Nunca es tarde!
Puede parecer evidente que resultará aún más conveniente adoptar una filosofía preventiva aplicando el tree test antes del lanzamiento de la web. Sin embargo, muchos se saltan este tipo de comprobaciones técnicas, por lo que terminan aplicándolas tiempo después, lo que no es obstáculo para que logres recopilar resultados bastante útiles que podrás corregir a tiempo.
¿Qué hace que el tree testing sea tan popular entre desarrolladores y diseñadores web? Además de ser una prueba relativamente sencilla de aplicar, proporciona datos tangibles. A continuación resumimos todos los beneficios que podrás disfrutar durante un tree test:
Contrario a lo que puede parecer, no todo es color de rosa cuando se habla del tree testing. A pesar de ser una prueba bastante eficiente, existen ciertas consideraciones a tener en cuenta antes de su aplicación, entre ellas las siguientes:
Deberás controlar los 4 pasos que te explicamos a continuación:
Durante esta primera etapa deberás diferenciar las páginas de acuerdo a su orden de prioridad: aquellas que quieres que sean revisadas con más atención serán el tronco del árbol, mientras que el resto serán las ramas.
Por lo general, las páginas de más visitas, como la de inicio o las secciones de contacto, se toman como parte del tronco, pero esa decisión quedará a criterio del equipo evaluador.
Luego, deberás hacer una lista de las tareas que esperas que los participantes cumplan durante el test. ¿Qué operaciones deben realizarse tanto en el tronco como en las ramas? Asegúrate de que esas instrucciones sean claras, porque de ello dependerá el éxito de la prueba.
Un ejemplo podría ser ordenarles que simulen el proceso de compra de un producto concreto, o que ejecuten determinada acción. Lo mejor será variar entre actividades complejas y otras más fáciles de completar.
Ahora que tienes tu prueba preparada, será momento de enviarla a los usuarios que ejercerán como evaluadores.
Lo ideal es que las rondas sean de al menos 50 participantes para que los resultados sean representativos de la realidad. En caso contrario, existe la posibilidad de que una muestra insuficiente termine por arrojar resultados sesgados.
Para obtener resultados tangibles deberás contar con métricas definidas previamente. Por lo general se utilizan estas: