Si estás administrando contenido para una página web, muchos son los detalles que tienes que controlar. Uno de esos aspectos es la URL canónica, que tiene suma importancia para los objetivos de estructuración y posicionamiento web.
Pero, ¿qué es eso de URL canónica? Es una especie de etiqueta o enlace cuya función es evitar el contenido duplicado en una página web, que se añaden en el encabezado del código html (head), incluyendo para ello el atributo canónico (rel=’canonical’).
Así se indica a los motores de búsqueda cuáles son esas páginas de una web que se deben mostrar en los resultados, las páginas que contienen información relevante o páginas principales.
Además, la URL canónica es una herramienta que puedes utilizar para indicar a los buscadores qué página dentro de tu sitio web quieres posicionar, en caso de que tengas gran cantidad de páginas con contenido relacionado o similar. Y ¡no te preocupes!, que tus visitantes ni lo notan, pero Google sí.
Pero para que te hagas una idea rápida, puedes usarlas cuando dentro tu sitio web tengas contenido sea similar y necesitas anticipar qué contenido es el que quieres posicionar ante el resto de las páginas de tu site.
Es recomendable usar la URL canónica en páginas tipo blogs, o en tiendas online, para ayudar a organizar las fichas de productos, así como para aquellas páginas web que tienen una misma versión de escritorio y para dispositivos móviles. Por tanto, al canonizar se redirigen a una misma página diversas páginas cuyo contenido es similar.
Así mismo, cuando los motores de búsqueda no pueden identificar el contenido y la versión a excluir de la indexación propia de los bots, o cuando no pueden identificar qué página les puede señalar algunas métricas como confianza y autoridad, se recomienda entonces hacer uso de la URL canónica.
Para evitar las posibles situaciones mencionadas en el párrafo anterior, y con ello que la relevancia de tu página web quede afectada en el ranking de Google, es necesario revisar las métricas de acceso. Y si observas que se crean varias páginas para un mismo contenido, es momento de usar la URL canónica.
Google y sus bots trabajan de manera ardua en todo momento para clasificar y otorgar rankings entre millones de páginas web, algunas de las cuales, incluso, pueden ofrecer contenido relacionado con el de tu site.
Piensa que, de no aplicar la URL canónica SEO y el llevar por buen camino las palabras clave y otras técnicas SEO, tu página puede perderse ante la competencia que sí ejecute la canonicalización.
A modo de ejemplo más detallado: si tienes una tienda online donde vendes en seis páginas diferentes televisores de 32” pero para cada página hay una diferencia: “color o prestaciones, entre otros”, es decir, página 1: Televisor 32” marca Samsung color negro. Página 2: Televisor 32” marca Samsung Gris oscuro. Y así con el resto. Para evitar posibles duplicados, lo que Google interpretaría como motivo de baja calificación, deberías identificar una de esas seis páginas con una URL canónica para indicarle al buscador que es la más relevante.
La canonicalización le advierte a Google que el contenido no es copiado o réplica, sino que esa página que tiene la etiqueta canónica es la página principal de tu página web y, por tanto, el usuario será redirigido a esa página principal.
A todo lo anterior hay que añadir que una página canónica se rastrea con mayor frecuencia, reduciendo los duplicados. Y asimismo, los motores de búsqueda la usan para evaluar el contenido y su calidad. Por ende, es más probable que, ante el resultado de una búsqueda, la página que resulte posicionada sea la de la URL canónica.
Aunque pienses que implementar una URL canónica debe ser algo difícil, en realidad es cosa fácil, pues no es necesario ser un experto en programación, solo hay que estar atento a ejecutar bien esa canonicalización.
Es decir, seguir una serie de técnicas implementando una serie de pasos durante su creación. Te contamos a continuación cómo hacerlo.
El atributo rel=“canonical” pertenece al elemento , cuya función es indicar qué versión es la principal dentro de un grupo de páginas con contenido similar de un sitio web. El modo de usar este elemento que incluye el atributo canonical debe ser insertado entre las etiquetas y del documento. (Ten cuidado de no insertarlo en el body, pues puede no ser tomado en cuenta como un atributo) Y hazlo lo más cercano al inicio del código.
Esto puede ser, por ejemplo:
<Link href="http://dominio.com/mipagina-favorita.html" rel="canonical" />
donde la dirección puede ser absoluta tal cual el ejemplo que acabas de ver, aunque también podría ser relativa. No obstante, es altamente recomendable hacer uso de las URL absolutas para evitar errores.
Veamos cómo usar el atributo rel=“canonical” mediante un ejemplo de un caso que puede parecerse a lo que ocurre con tu sitio web:
Imagina que tienes tu tienda online tal como comentábamos en el ejemplo anterior de los televisores. Como puedes ver, su similitud es que son marca Samsung, pero cambia el color.
Una buena manera de escoger cuál es tu página representativa puede ser la de ese televisor con el color favorito de la mayoría de los usuarios. Y con ello indicar la URL canónica.
Después de ese análisis con el que determinamos las preferencias de los clientes, el código puede quedar de la siguiente manera:
<Link href="http://mitienditaonline.com/televisorsamsung32-negro.html" rel="canonical" />
Con el atributo rel=“canonical” podrás lograr que los motores de búsqueda identifiquen qué página indexar en relación con las duplicadas, las cuales no deben indexar. De esta forma, el rel=“canonical” sirve para definir cuál de tantas páginas similares es la original o favorita de un sitio web.
Las redirecciones 301 son una técnica de canonicalización ideal para corregir errores. Por ejemplo, puede señalar una página que antes existía y que ahora ya no existe. Y que además la encontrarás a través de otra URL de forma categórica.
En todo caso, las redirecciones 301 desvían el tráfico que genera una URL con contenido similar llevándola hasta una URL canónica. Es decir, la redirección 301 indica a los motores de búsqueda que una página dejó de existir. Y todos los enlaces o visitas que lleguen a esa agonizante página deben redirigirse a la nueva URL.
Esto con la gran ventaja de que el usuario no ve esa página redirigida y, en cambio, va directo a la nueva página. Ahora bien, apliquemos un ejemplo de cómo ejecutar redirecciones 301:
Se tiene una URL “A” que ya no existe y, por tanto, ya no la necesitas, y tienes una URL “B” que es la definitiva., debes eliminar la URL “A” por un periodo aproximado de 6 meses, según Google Search Console, y acto seguido redirigir a la URL “B” donde los bots de Google comprenden la redirección.
Además, Google toma en cuenta la autoridad de la antigua página para que las redirecciones 301 la traspasen a la nueva URL. En resumen, lo que se hace es elegir una URL canónica y se redireccionan las otras URL hacia ella.
Para tener éxito al usar las URL canónicas en tu web debes partir de la premisa de la sencillez. Cuanto más fácil de comprender, mejor será la aplicación de esta técnica en beneficio de tus páginas y podrás localizar y solucionar los contenidos duplicados. Para ello verifica lo siguiente:
<Link rel="canonical" href="https://www.website.com/page-a/" /> En vez de <link rel="canonical" href="/page-a/" />
Evitar cometer estos errores frecuentes en el momento de crear una URL canónica: