En cuanto a usos de las redes sociales ellas prefieren conectar con gente que ya conocen y socializarse. Por el contrario ellos están más predispuestos a dar su ubicación, su opinión y en general a “buscar”.
Los estudios demuestran que existen diferencias notables en pautas de comportamiento y hábitos de uso entre hombres y mujeres en el social media.
Los hombres predominan como usuarios de smartphones (32,3%) por encima de las mujeres (16,8%), ellas los utilizan para estar en contacto con la familia y amigos mientras que ellos se interesan por la fotografía, los videos, la música y los juegos.
En cuanto a usos del social media ellas prefieren conectar con gente que ya conocen y socializarse. Por el contrario ellos están más predispuestos a dar su ubicación, su opinión y en general a “buscar”. Estos parámetros se traducen en unas preferencias bastante definidas hacía una red social u otra:
Las mujeres son de Facebook y los hombres de Foursquare: Ellas prefieren ver y comentar con personas conocidas y se interesan especialmente por las imágenes. Ellos prefieren opinar y compartir su ubicación. Los estudios demuestran que las mujeres son más reservadas a la hora de desvelar su localización mientras que ellos encuentran una motivación en la existencia de badgets y status.
Twitter es probablemente una de las redes que más se inclina hacia el sector masculino con un 40% de usuarios de hombre, frente a un 27% de perfiles femeninos, y YouTube y Linkedin son las más igualadas. Encontramos también diferencias en la nueva oleada de redes sociales: como puede ser Pinterest más utilizada por mujeres. Ellas consultan en Pinterest o blogs a la hora de tomar decisiones de compra o dejarse aconsejar mientras que en Google+ más de 2 tercios de los usuarios son hombres.
También en el e-commerce los hombres son de Marte y las mujeres de Venus. Según el estudio “Factores de éxito en el E-commerce” del Centro Comercial de E-commerce (ECC) los aspectos que el usuario más valora del e-commerce varían según el género.A las mujeres les influye la configuración de la web, los precios o el surtido de productos como factores relevantes, mientras que los hombres nombran factores técnicos como una versión optimizada para móvil o la existencia de una aplicación de compra. También en su modo de navegar encontramos diferencias, ellos tienen un objetivo claro mientras que ellas “se dejan inspirar”.
Estos estudios sirven a las marcas para poder crear estrategias digitales cada vez más adecuadas a su público y utilizar estas redes como think tanks con los que escuchar al consumidor. Si conocemos exactamente dónde están nuestros consumidores y cómo tenemos que dirigirnos a ellos, es mucho más probable que les podamos hacer llegar el mensaje que queremos.